Philip K Dick

En un "de oca a oca y tiro porque me toca" internetero, he encontrado un viejo artículo de Rodrigo Fresán acerca de Philip K Dick. No dice nada nuevo sobre él e incluso es posible que sucumba a la fama de drogadicto del escritor, que Dick trató de desmentir sin éxito; por ser falso o porque sí, pero es un muy buen artículo.

"El año es el sagrado año de 1974. Es el 20 de febrero, aleluya, aleluya. A los 46 años, ahí mismo, el autor norteamericano de ciencia-ficción Philip Kindred Dick –luego de años de consumo de anfetaminas y comida para perros– está a punto de tener una revelación divina. Todavía dolorido por una contundente operación odontológica, Dick abre la puerta de su departamento en Fullerton, California, y se encuentra con una chica de pelo oscuro. A Dick –sobreviviente del naufragio de varios matrimonios, divorciado serial– siempre le gustaron las chicas de pelo oscuro, sonríe con la escasa capacidad de sus encías castigadas y, entonces, repara en el colgante que la chica lleva al cuello: un dije en forma de pez, el símbolo de los primeros cristianos. Brilla. Dick experimenta la sensación de ya haber estado y de ya haber sido. Nuestro mundo “real” desaparece para revelar la verdad debajo de nuestra fachada: todavía estamos en el año 70 después de Cristo, todo lo demás es ilusión y esa chica es una cristiana gnóstica y rebelde que viene a comunicarle un mensaje urgente: “La rebelión está en marcha”. Ya nada volverá a ser igual para el escritor de ciencia-ficción Philip Kindred Dick del mismo modo en que ya nada vuelve a ser igual para cualquiera que abra por primera vez un libro del escritor de ciencia-ficción norteamericano Philip Kindred Dick.
La verdad está ahí adentro."

El resto, para el que tenga interés y ánimo, está en pagina12.com.ar

Entradas populares de este blog

Pedro Salinas - Si me llamaras

Joaquín Reyes - La Hora Chanante

Primera evocación