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Mostrando entradas de julio, 2005

Cosas que sólo pasan en las películas

Directo de Otro blog más que lo ha traducido de nostalgiacentral.com . 40 cosas que sólo pasan en las películas: Siempre se puede encontrar sitio para aparcar justo enfrente del edificio al que quieres entrar. Cuando pagues un taxi, no mires la cartera mientras saques un billete. Simplemente coge uno al azar. Será la tarifa exacta. Los boletines informativos de la tele normalmente sacan una historia que te afecta personalmente en el preciso momento de emitirla.. La música tenebrosa (o cantos satánicos) proveniente de un cementerio debe ser siempre investigada con detenimiento. Cualquier cerradura puede forzarse con una tarjeta de crédito o un clip en cuestión de segundos. EXCEPTO si el edificio está en llamas y hay un niño dentro. Si decides ponerte a bailar en medio de la calle, todo el mundo que se añada se sabrá todos los pasos. Todas las bombas con temporizador electrónico llevan incorporado un visor con grandes dígitos rojos para que sepas exactamente cuando van a estallar.

El derrumbe de la República

"El profesor John K. Galbraith, uno de los defensores del ingreso garantizado, recuerda que ningún texto jurídico en la historia de Estados Unidos fue tan enconadamente atacado por los portavoces del mundo de los negocios como el proyecto de Ley de Seguridad Social de 1935, estableciendo un plan federal de pensiones. Quien se tome la molestia de rastrear en las hemerotecas encontrará que fueron escritos augurios de este tenor: «Con el seguro de desempleo nadie trabajaría; con el seguro de vejez, nadie ahorraría, y el resultado final sería la decadencia moral, la bancarrota financiera y el derrumbe de la República»." Por suerte, el sentido común vuelve con fuerza y los derechos que con sangre y muertos lograron nuestros abuelos y bisabuelos en la primera mitad del siglo XX son ahora devueltos al capital porque nada hay mejor para la aconomía que un trabajador pobre, que será tal vez un consumidor pobre, pero sumiso. Sobre la renta básica, de la que habla verdaderamente el artí

Todo lo que se puede decir se puede decir claramente; y de lo que no se puede hablar hay que callarse

Si lo decía Wittgenstein en 1918 sería por algo... Tractatus logico-philosophicus

Ángel González

El pasado martes 28 de junio Ángel González participó en Bilbao en la presentación del último número de la revista de poesía ZURGAI , dedicado íntegramente a su obra. El motivo central del acto, además de rendir homenaje a uno de los poetas más grandes de la literatura española, y, desde mi desconocimiento y mis filias, el mejor poeta vivo de España, fue disfrutar de un breve recital poético en el que Ángel González, a sus 80 años, repasó alguno de los poemas que considera más representativos de su obra. Leyó sus poemas como quien habla o como quien reflexiona, sin retórica apenas, con fluidez, de forma sencilla y con una voz extraordinaria, jalonada ocasionalmente de fuertes toses, porque ya vamos teniendo unos años y uno no puede estar casi una hora hablando sin pagar un precio. Ha sido sin duda uno de los momentos más hermosos que jamás he disfrutado, mientras recitaba poemas que casi sé de memoria de tanto releerlos, aderezados con breves introducciones que desentrañaban el signifi