Entre Venezuela y Nadalandia

Eduardo Galeano es un escritor enorme, pero además está comprometido con los humillados y los nadies de este mundo hasta el punto de haber participado en el referéndum venezolano como observador internacional (y hasta más puntos aún más meritorios).

Galeano quería que ganase Chávez, y ganó. Aunque sin ayuda de trampas y cartones, ni con mentiras del Centro Carter, la Organización de Estados Americanos y otros observadores internacionales, como él mismo, que velaron y avalaron un proceso limpio... a pesar de los intereses de EEUU, de los venezolanos de bien, de los españolitos sin vergüenza, etc...

Hay un texto de Galeano aquí, del cual reproduzco a continuación un pequeño fragmento. Merece la pena leerlo, da que pensar que un hombre de su talla diga lo contrario que "El Mundo", "El País", TVE, todos ellos voceros de mentiras contra un hombre que gobierna democráticamente. Esto dice Galeano:

"Este tirano inventado por los grandes medios de comunicación, este temible demonio, acaba de dar una tremenda inyección de vitaminas a la democracia, que en América Latina, y no sólo en América Latina, anda enclenque y precisada de energía.Un mes antes, Carlos Andrés Pérez, angelito de Dios, demócrata adorado por los grandes medios de comunicación, anunció un golpe de Estado a los cuatro vientos. Lisa y llanamente afirmó que “la vía violenta” era la única posible en Venezuela, y despreció el referéndum “porque no forma parte de la idiosincrasia latinoamericana”. La idiosincrasia latinoamericana, o sea, nuestra preciosa herencia: el pueblo sordomudo"

"“¡Aquí no hay libertad de expresión!”, claman con absoluta libertad de expresión las pantallas de televisión, las ondas de las radios y las páginas de los diarios.Chávez no ha cerrado ni una sola de las bocas que cotidianamente escupen insultos y mentiras. Impunemente ocurre la guerra química destinada a envenenar a la opinión pública. El único canal de televisión clausurado en Venezuela, el canal 8, no fue víctima de Chávez sino de quienes usurparon su presidencia, por un par de días, en el fugaz golpe de Estado de abril del año 2002. Y cuando Chávez volvió de la prisión, y recuperó la presidencia en andas de una inmensa multitud, los grandes medios venezolanos no se enteraron de la novedad. La televisión privada estuvo todo el día pasando películas de Tom y Jerry.Esa televisión ejemplar mereció el premio que el rey de España otorga al mejor periodismo. El rey recompensó una filmación de esos días turbulentos de abril. La filmación era una estafa. Mostraba a los salvajes chavistas disparando contra una inocente manifestación de opositores desarmados. La manifestación no existía, según se ha demostrado con pruebas irrefutables, pero se ve que este detalle no tenía importancia, porque el premio no fue retirado."

Y mientras, en la dolorosa derrota, Carlos Andrés Pérez sigue dispuesto a ver morir o caer a Chávez, sea como sea, por el bien de Venezuela y de los venezolanos.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Pedro Salinas - Si me llamaras

Joaquín Reyes - La Hora Chanante

Primera evocación