La compañía
Lo mejor es, siempre, la compañía. No es que quiera repetirme pero el poema de Jorge Riechmann "Ven, te acompaño" es una gozada. Se acaba el año y pienso en las películas que, esperadas largo tiempo, un día ya no podré ver, del mismo modo que recuerdo en ocasiones las telenovelas que mi abuela dejó a medias, las conversaciones que quedaron inconclusas entre ambos, la promesa que le hice de que pronto volvería a casa, el último día que la llevaron al hospital. No es que esté triste (lo estoy a veces), sólo hago memoria. Puede que el tiempo observe la separación de esa pareja que se aleja abrazada. Pesará ese día tanto la separación, como el camino recorrido juntos. Y ya que toca cambiar de año para seguir midiendo un tiempo que sólo se tiene a sí mismo como referencia, y dado que un nuevo año es siempre motivo de augurios, os deseo buena compañía por mucho tiempo. Por cierto, menciona la wikipedia en su entrada sobre el año nuevo este texto del Evangelio según...